viernes, 18 de marzo de 2011

La vida en Roma de Juanelo y Sole

Estos días en Roma, nos dedicamos a caminar, a mironear recovecos, a comer y saborear los platos. Y a empaparnos. Sí, Roma decidió que a nosotros nos venía mejor la lluvia, así que tuvimos dos días enteros de lluvia. A veces tranquila, a veces garúa, y otras torrencial.
Cómo eso igual no nos desanimó, salimos a patear con nuestras argentinas zapatillas y a verle la cara a los romanos cuando les habláramos en cocoliche.
Tengo muchas cosas para contar, tantas que no todas van a ser escritas ahora... sino no voy a tener nada para contarles a la vuelta. Así que voy a comentarles algunas impresiones de esta bella ciudad:
- Con Juan todavía no logramos entender cómo toman el café los tanos. Dos cafe latte nos confirmaron que les gusta tomarlo medio frío. El macchiatto resultó ser un shot de café extra fuerte, nada que ver con un cortado. Más bien es un levata muertos. Si descubro cuál es el café que más se parezca a un café con leche caliente, se los haré saber.
- Otra cosa que me llamó la atención, es que mientras desayunábamos la gente hablaba por teléfono, se tomaba el café y.... jugaba a las tragamonedas!!!! Qué onda?? Es como si en Café Martínez, mientras me mando una torta rogel, meto unas fichas y pierdo unos pesitos. Muy loco.
- En la calle de Roma lo que más se escucha no es los gritos de los tanos mientras hablan, sino las ambulancias. Alguna que otra vez un patrullero. Tienen unas calles tan angostas y sin vereda, que se la deben pegar bastante seguido. Igual manejan muy bien, y tienen unos autazos.
- Hoy por la mañana fuimos a un parque que se llama Villa Borghese. Confirmamos que el tan conocido aspecto mafioso de los italianos, se ha trasladado a Roma y a los patos que habitan en el lago del lugar. Vi como entre tres cagaban a picotazos a uno. Solo con la intervenciçon de una gaviota lograron separarlos.

Les cuento que los italianos son muy amables, hemos improvisado a lo loco en inglés, español o un intento de italiano y siempre nos entienden y ayudan. las últimas noches fuimos a comer a un restoran que queda cerca, La Soffita Renovatio. Está lleno de gente de Roma, por lo que parece ser bueno. A mí me convenció, y realmente comimos de diez. Yo volví a tomar cerveza después de 5 años, y estaba increíble. No paramos de comer pizza y pasta. Son tan ricas que viviría a esa dieta.
Roma es un paraíso para un celíaco... la verdad que me siento muy a gusto.

En cuanto a lo mejor de todo.... los lugares que vimos. La lluvia nos mojó y resfrió, pero no hizo que dejáramos de caminar. Estuvimos en la Fontana di Trevi, en el Panteón, entramos a la Basílica de San Pedro y sus catacumbas, vimos cada estatua con atención. Las Iglesias... debo confesar que hace mucho que no entraba tanto en iglesias. Algunas más austeras, otras góticas, otras recargadísimas... todas tenían algo increíble para mostrar. Me di cuenta que de las imágenes de vírgenes, las que más me gustan son las bizantinas (qué específico!). Conocí Piazza Spagna, y desfilé jejeje. Pero lo que me enamoró, es que los romanos no tienen lugar para jardines, entonces se hacen en sus terrazas y balcones, un mundo de plantas y flores. Limosneros, naranjos, violetas de los alpes. Nada los amedrenta. Eso es realmente hermoso. Pagaría lo que sea por vivir en Roma y tener mi terraza jardín.
Igualmente, el premio mayor se lo ganó el día de ayer, el Coliseo, el Palatino y el Foro Romano. Nos llovió todo el día. Caminamos 9 horas seguidas sin casi almorzar, y sin embargo teníamos ganas de ver más. Pensar que estábamos en los lugares donde había estado Julio César, otros que eran del 500 AC es realmente imposible de creer. Me gustó meterme en escaleras o pasajes y pensar que nunca nadie los había descubierto. Pisos hermosos enteros hechos a venecitas. No puedo describir lo que fue eso.
Culminamos parte del paseo tomando un café en una cafetería arriba del altar de la patria, con una vista de toda Roma antigua. Tuvimos suerte a pesar de la lluvia, ya que ayer era el día de la unidad italiana y fue feriado, así que nos ahorramos varias entradas porque eran abiertas al público en ocasión del festejo.

Quisiera contarles más o escribri más ordenado, pero el blog no me deja copiar y pegar... Hoy recorrimos los lugares que nos faltaban y nos dedicamos a tirarnos en un parque a descansar un poco nuestras doloridas patas.
La próxima crónica, supongo que será desde Florencia.
Ciao bambinos!

3 comentarios:

Los Pibes dijo...

Que bueno leer que la están pasando tan pero tan bien. Estamos todos muy contentos y les mandamos saludos.
Sigan disfrutando.

Dafné dijo...

¡Qué lindo todo lo que están viviendo! Por más que nos cuenten cosas en el blog, seguro van a tener muchísimo más para contar cuando lleguen. Y me parece buenísimo lo del blog porque permite que, además de saber que están haciendo y por donde andan, conozcamos los sentimientos que les generan los diferentes lugares, la gente y también después ustedes podrán recordar con más facilidad todo.

Sigan disfrutando y contándonos, así podemos recorrer a través de sus relatos los lugares por donde pasan.

Anónimo dijo...

Hola Sole y Ale:
La idea del bolg esta rebuena y además uds tienen una enorme capacidad para transmitir emociones.
Sentimos que estamos caminando con uds bajo esa bella lluvia romana en medio de esa tremenda historia.
Los queremos mucho
EDU Y ALE